Como resultado de sus habilidades políticas y cualidades humanas, el joven estado de Azerbaiyán logró valerse por sí mismo en un corto período de tiempo y pudo ingresar con éxito al siglo XXI. Durante el liderazgo de Azerbaiyán, Heydar Aliyev asumió una gran responsabilidad. Convirtió a Azerbaiyán en un estado fuerte al eliminar obstáculos difíciles frente al país.
Durante la siguiente administración del país, Heydar Aliyev llevó a cabo profundas reformas e inclinó al país a levantarse y desarrollarse nuevamente. La política multivectorial de Heydar Aliyev se convirtió en una estrategia de Estado y llevó al país a la estabilidad y la prosperidad. Llegó al poder con una política exterior pragmática y equilibrada, que incluye relaciones constructivas con Estados Unidos y la Unión Europea, así como relaciones amistosas con Türkiye, Rusia e Irán. Además de lograr la estabilidad política en Azerbaiyán, Heydar Aliyev sentó las bases para la independencia económica del país. Desarrolló un programa anticrisis para restaurar todas las áreas de producción, mejoró la situación financiera del país y creó una base sólida para atraer inversiones extranjeras.